Capitulo 2

Al otro día, después de desayunar, salimos al colegio y encontré una carta de una escribanía, le dije a mis hermanos que esperen, se la llevé a papá y volví a salir, quería ver a mis amigas, las necesitaba mucho.

Al volver a casa, otra noticia me esperaba.

Pasé casi todo el día tratando de averiguar que contenía esa carta, pero nada se me ocurría, ya que nunca recibíamos cartas de ese tipo. Llegue de la escuela, Esta vez mis padres no esperaron a la cena, en cuanto llegó mi hermana nos reunieron a todos y nos dijeron:

- Nos vamos a mudar.

Nadie dijo nada. Y para romper el silencio mi madre agregó:

- A Inglaterra.

- ¿A Inglaterra? ¡Mamá, no podemos mudarnos, recién empiezo a trabajar, y ahí todos hablan en Ingles! - Fue lo que dijo mi hermana mayor.

- Podes encontrar otro trabajo, e Inglés saben un poco, se van a acostumbrar.

- ¿Por qué a Inglaterra? - Dijo mi hermano.

- Hoy recibimos una carta de la escribania, el abuelo nos dejó su casa de herencia.

- ¡Mamá, no puedo dejar a mis amigas! - Dijo mi otra hermana.

- Vamos a venir para navidad y pueden visitar a sus amigos. Se que vamos a estar mejor ahí

Odiaba que todo lo tengan que decidir mis padres, sabia que me iba a acostumbrar, ¿pero mientras? Iba a extrañar a mis amigas, a mis primos, mi casa.

En la cena no le dirigimos ni una palabra a nuestros padres, estábamos enojados con ellos, aunque sabíamos que nada podíamos hacer.

A la otra semana era el acto de fin de año en la escuela, recién ahí le conté a mis amigas :

- Chicas, tengo una mala noticia - Le dije a mis amigas

- ¿Que? - Dijeron todas a la vez.

- Me mudo.

- ¿A donde? ¿Te vas a cambiar de colegio? ¿Nos vas a venir a visitar? - Parecían tristes porque me iba.

- Lejos.

- ¿A donde? Dijeron medias emocionadas.

- A Inglaterra, lo se es muy lejos, pero mi abuelo nos dejó su casa.

- ¿A Inglaterra? Guaaaaaaau - Lo único que dijeron.

Sentí como que no les importaba que yo me fuera.

Aproveché todo el tiempo que me quedaba para estar con mis amigas. Pasamos las fiestas en casa de mi abuela Paterna, y unas semanas después, el 14 de enero, volamos hacia Inglaterra. Era la primera vez que empacaba toda mi ropa, nunca había pensado que me iba a mudar a otro continente. Llegamos, la casa era el Liverpool, yo recién me enteraba a donde íbamos a vivir, era en la calle Upton Green al 26. Mi papá se había traído sus discos preferidos, pero yo me escondí algunos de los que me gustaban en mi valija.